A lo largo de estos tres meses que llevo trabajando en la creación de este blog, he experimentado diversas sensaciones que han ido cambiando con el tiempo. Ahora llega el momento de las conclusiones y de la evaluación personal. ¿Se siente bien uno escribiendo un blog, publicando sus cosas? Supongo que la respuesta dependerá de la personalidad, de la capacidad literaria que posea el individuo, e incluso de las ganas que tenga de comunicarse con los demás.
Pese a que soy una persona no dada a publicar mi historia, por sencilla que sea, para mí ha sido una experiencia gratificante. El expresar, de este modo tan peculiar, mi opinión sobre los temas tratados, me ha servido para aprender y afianzar conceptos relativos al mundo laboral y sobre todo, para reflexionar sobre cómo aplicarlos en mi vida.
La dinámica y la temática de la asignatura culpable de este blog, me parece muy acertada y estimulante para el alumno, en general, y sobre todo para el alumno de Publicidad y Relaciones Públicas. La libertad en cuanto a formato, extensión y contenido es quizá, lo más destacable de este modo de evaluación y lo que más me ha gustado.
Espero que mis palabras hayan sido de interés para alguien, y si no es así, por lo menos a mí me han servido, ya que aparte de poseer una visión bastante amplia y estructurada de los pasos a seguir en mi futura búsqueda de empleo, me voy con la satisfacción de haber roto el hielo, en este escenario desconocido para mí.
Muchas gracias.
Por cierto, si os gusta lo que digo y cómo lo digo, ¡no dejéis de visitar mi otro blog de la asignatura Documentación Audiovisual!